Los 6 puntos de los mexicanos, si bien no les dan la clasificación, sí les ponen virtualmente en octavos de final, aunque para asegurarse la primera plaza del grupo necesitan, por lo menos, un empate. Suecia, por su parte, está obligada a ganar, ya que Alemania no debería pasar apuros para imponerse a Corea del Sur, por lo que todo lo que no sea salir a por los 3 puntos, sería casi como suicidarse para una selección que estuvo a segundos de la gloria hace menos de una semana.
Respecto a las sensaciones dejadas por uno y otro equipo, los mexicanos llegaron a Rusia en medio de un ambiente muy pesimista, pero ahora se han convertido en una de las selecciones que mejor cara han dado en las dos primeras jornadas del torneo. Suecia, por su parte, no ha sorprendido. Su fútbol es muy reconocible y, tras ganar a los coreanos en su debut, estuvieron a punto de dar la campanada frente a Alemania. El problema para los nórdicos no es el nivel que han mostrado, el problema es el estado anímico en el que estarán tras la derrota in extremis frente al vigente campeón.
Explicación: Suecia se la juega y no dará su brazo a torcer. Calidad no tiene en exceso, pero cuando los suecos empujan… Eso sí, aunque ganen, lo de dejar su puerta a cero, eso no lo vemos.
Explicación: Los suecos tienen que salir a por el gol desde el inicio. Van a empujar desde el minuto 1 porque ponerse por delante pronto puede ser la llave hacia la clasificación y si tienen suerte y les entra la 1ª o la 2ª ocasión… pues eso, cuota 6.50.
Explicación: Cambiemos el cuento. Suecia saldrá a por todas, pero México también juega, y su contra es temible, como ya pudo comprobar Alemania. El Tri tendrá opciones de sorprender al contragolpe, y si marca primero, el golpe moral que se llevará Suecia puede ser similar al que recibió Polonia el domingo tras el 2-0… y ya sabéis… a los polacos le cayeron 2 en 5 minutos…