Alemania está contra las cuerdas tras caer ante México en la primera jornada del grupo, y se juega su futuro en el torneo frente a una Suecia que hizo sus deberes ganando a Corea del Sur, y que planteará un partido defensivo sabiendo que el empate le pondría a las puertas de los Octavos de Final. Esperamos un duelo con claro color alemán desde el primer minuto y, aunque las contras suecas pueden ser fatales para el campeón, vamos a confiar en el resurgir alemán para buscar mercados pensando en una goleada de los de Löw.
Desde luego, potencial ofensivo tiene de sobra Alemania, y vamos a ir a muerte con un equipo que sobre el papel es muy superior a su rival… y que además tiene que ganar… y golear.
Explicación: No son de los que juegan a medio gas en las grandes ocasiones los alemanes, y esta, desde luego, lo es. Esperamos un salida en tromba del vigente campeón. Primero, porque lo necesita, y segundo, porque no querrá que le ocurra lo mismo que ante México, que salió al campo mucho más enchufado, y le puso contra las cuerdas desde la primera jugada del encuentro. Así, pensando en que el rodillo comience su trabajo de demolición desde el pitido inicial, el hándicap al descanso no es descartable.
Explicación: Seguimos en la misma línea, y pensando en una Alemania demoledora, no creemos que los de Low vayan a poner el freno de mano una vez que se pongan con ventaja, así que, visualizando un partido sin tregua y con continuas llegadas germanas sobre la puerta sueca, seguimos con el hándicap, pero esta vez nos la jugamos a la goleada al final del partido, y ya que nos la jugamos… pues a por todas.
Explicación: Werner no tuvo un buen debut mundialista ante México, pero en un partido tan importante como este, el joven delantero Leipzig tendrá que demostrar por qué es uno de los llamados a comandar el ataque de los centroeuropeos en los próximos años. Ocasiones tendrá, y si marca en los 2 tiempos… pues nos dará una alegría.